miércoles, 17 de febrero de 2016

Para matar, sarcasmo.


Culminar en la realidad intranquila de la tristeza, reflejos de ventaja sobre la desesperación impulsada a ir por mas, en la adversidad concluirá. Las ventajas de tener las espaldas de acero, o en su defecto la costumbre del sabor del veneno, la traición. 

Parece hoy, la escasez de inteligencia ser un protagonista en la vida de mis enemigos, pues hacen alarde en un sigilo que mucho eco genera, y con las inadecuadas presencias. Los oídos que una vez fueron el artificie de tu molestia, los ojos que pasaban de ti al cavar tu propia tumba, hoy te verán, te escucharan para dejar entrar un poco de esa basura, solo para rebatir... limpiar la escena contigo y marchar.

De excusas se arrebatan sus balbuceos incoherentes, como las armas débiles rebotan de mi piel, tristemente para tu mente, no podrías ser menos eficiente. Tu elocuente servidor se tomara la molestia de acomodarte poco de la mierda que tanto necesitas. Decorarte de realidad, y con su vanidad demostrarte de lo que es realmente capaz.

Tu capacidad de interpretación ante mi discurso es nula, dejando en evidencia tu carencia de potencial argumental. Vaya, que triste para ti... Ni siquiera tuve que esforzarme  Es normal que esto te ofenda, la simplicidad de tus textos es aplicable a tu contexto diario, frágil y manipulable, débil y perceptible.

Otra promesa esta rota, como cada promesa lo esta.

Soy tan sarcástico, lo siento...de verdad lo siento.


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