Dispersión

Vagando en un pensamientos estáticos una y otra vez, diluyendo la sangre con el vigor de la resaca. 

Simplemente ya no estoy aquí. Son mas las forzadas despedidas que las ganas de volar. Sentimos el calor de la mañana como el adiós de la luna y un fragmento de nuestra mente y su vida mas allá, en algún otro momento, ido a algún otro lugar. Nos atraparon para liberar la imaginación. 

Ya no hay que pensarlo dos veces para arriesgarse, para robarte besos, para atrapar tu aliento, para liberar el contacto. Entonces, entiendo que quizás jamas estuviste de mas y que en un frasco captare las memorias de mi tez tenue junto a tu ébano. 

Viajaremos lejos en la oscuridad, por que las puertas están cerradas. Viviremos en la luz que opaca la adversidad. Te saludare en la obsoleta realidad que nos rodea para celebrar la exclusividad de una sonrisa que aun puede darse el lujo de adelantarse en lo jodido. Que estamos bien... mal de la razón. 

Vuela con paciencia. Por que simplemente ya no estoy aquí. Por que simplemente ya no

 estamos aquí.

Volatil.

 Apasionada y un poco exagerada. Siempre atenta y vacilante, como intentando disiparse, mezclarte e inadvertida, colarte de las sombras que claudican en las aguas de tus mares y ensordece las bocinas. En la gloria la ilusión se desprende de tus ojos como esperando tras la cortina que la luna se mantenga viva. Escucho el silencio de tus labios derretir su color en mi retrato siendo yo la frase de tus hechos añorados, confundidos y desesperados. 

Frases emergentes desencadenan la alegría para atar la confusión. Todo es una ilusión? 

Eres real, tan real que puedo palparte al otro lado pintada y colorada. Voluble a una sonrisa de amor renuente devuelta sin atención. Volátil hilo de tiempo en el cual nos balanceamos, helados con el espacio y la fragilidad que aguarda para verte una vez mas. 

Un segundo mas, y solo un par de frases para enterrar la rutina.

Solo un millón de letras atemporales como carta de presentación.

Su ultima respiración agito las llamas del horizonte y del corazón a tu boca se llevo un susto inesperado. La vida logro zafarse para nosotros, mortales incautos, espinas de placer. La victoria esta muy lejos de la realidad, nadie nunca logro ganar, nadie nunca consigio liberarse... la condena inminente nos tomo desprevenidos aun cuando ya veníamos advertidos.